YOUNG EUROPEAN HERITAGE MAKERS: EL PATRIMONIO DE BAILÉN
Somos de Bailén, Jaén, en Andalucía, España. En Bailén hay muchísimos lugares que nos recuerdan que tenemos un pasado con miles de años de historia. Pero si se nos conoce en el mundo es por una gesta que ocurrió un día de Julio de 1808, aquí el ejército de Napoleón cayó derrotado por primera vez en una batalla a campo abierto. Nuestro patrimonio no es sólo material, aunque este debemos conocerlo, cuidarlo y legarlo al futuro al menos tal y como nos lo han entregado nuestros padres y abuelos. Por ello, hemos realizado este proyecto con nuestros alumnos donde han investigado sobre la historia de nuestra localidad.
Tenemos la Iglesia de la Encarnación con más de 500 años, son también patrimonio algunas fachadas históricas como la del Palacio de los Ponce de León o la de nuestro Ayuntamiento y edificios religiosos como la ermita de la Soledad, la del Cristo, Limpia y Pura o la de Zocueca. Todo este patrimonio artístico nos une desde lo local a lo europeo. Cualquier estilo artístico de los que se aprecian en los edificios de Bailén son estilos europeos. El gótico, el renacentista, barroco o neoclásico prueban que Europa en lo artístico ha sido siempre una unidad.
Nuestro patrimonio natural es importante, la típica dehesa mediterránea en el parque de Burguillos donde hay una gran variedad de flora y fauna destacando el lince que merodea estos parajes. Pero el orgullo de nuestra ciudad es el hecho que nos ha dado un lugar en la historia, y el ser conocidos en todo el mundo. Hay en nuestras calles y plazas elementos que nos recuerdan que aquí el pueblo español venció al ejército de Napoleón. Ejemplos son el monumento de las Palmeras, la estatua del general Castaños, Reding, María Bellido…..
Esta Batalla enmarcada en la Guerra de Independencia en 1808, traspasó nuestras fronteras y tuvo eco en toda Europa y América. Bailén supuso para los europeos que luchaban contra el ejército de Napoleón, la constatación de que no era invencible y que el pueblo era quien mejor podría defender su libertad frente a la tiranía.
Fernando Quiñones, poeta andaluz dijo que “hay que ser muy local para llegar a ser universal”. La Batalla de Bailén es el mejor ejemplo de esto, un hecho tan local se convirtió en algo muy importante para la historia de Europa. Es obligación nuestra velar porque la memoria de la Batalla y su trascendencia europea se conserve. Por esta razón nos hemos documentado trabajando en el archivo, biblioteca y en la red para conocer lo mejor posible la historia de Bailén.
Fue nuestra Batalla un hecho histórico sin precedentes en Europa. Hay que enmarcarlo en una época muy importante para la formación del mundo que conocemos hoy. La época napoleónica supuso no sólo un cambio en la forma de ver Francia, sino también de ver Europa. La Guerra de independencia o Guerra peninsular no se ciñó a un enfrentamiento entre franceses y españoles, fue una guerra internacional donde el ejército regular junto con el pueblo, guerrilleros, políticos, gente común, mujeres… y la ayuda de ejércitos extranjeros como el inglés o mercenarios de otros países de Europa, se enfrentaron al invasor francés.
Y Bailén entonces, ¿qué lugar ocupamos? Pues uno muy importante, nuestra batalla de 1808, la victoria del General Castaños y de Reding frente a los franceses, supuso la primera derrota de un ejército de Napoleón a campo abierto. Esta derrota tuvo eco en toda Europa, el conocimiento de esta victoria en los países ocupados por Napoleón fue el detonante de esta revuelta frente al invasor, Bailén demostró que el ejército de Napoleón no era invencible y que el pueblo unido junto con el ejército es capaz de derrotar la tiranía y la opresión. Bailén supuso un modelo para aquellos que soñaban con vivir en libertad pudiendo elegir su propio destino como nación. Debemos darle importancia a este hecho, Bailén no fue una batalla sin importancia como puede parecer, esta victoria no supuso la expulsión del invasor. La importancia de la Batalla del 19 de Julio de 1808 es más moral. Bailén hizo ver a Europa que Napoleón no era invencible.
Para concluir sólo queremos llamar la atención en la importancia que tiene en pueblos como Bailén estos hechos históricos. Para los lugares pequeños tener la posibilidad de estar en los libros de historia de todo el mundo es un motivo de orgullo colectivo. No sólo Bailén, ciudades como Leipzig, Waterloo, Lützen, etc, son lugares unidos por el hecho de haber acogido batallas y que hoy pueden y deberían ser lugares donde se enseñe que las guerras son la peor solución para cualquier problema. Estos pequeños lugares tenemos el deber de conservar la memoria de nuestro pasado para que nuestros vecinos, los de cerca y todos los de Europa, conozcan y aprendamos del pasado, para continuar construyendo una Europa unida y en paz.